martes, 3 de julio de 2012

Decisiones

El pensamiento, el deseo de cambio, venía dando vueltas en su cabeza desde hacía rato. Dos años tal vez. O más. Por momentos sabía que ya no había vuelta atrás. Que una vez que el bichito la había picado ya nada sería igual. Pero aguantó.

En una de esas la carrera me vuelve a gustar. En una de esas un profesor me vuelve a encantar con ella; un libro, una maqueta. Algún compañero, por hay. Pero no. El pensamiento, en forma de duda, siguió allí, agrandándose cada vez más y extendiéndose y contaminándolo todo. Taladrándola por completo y sin matices.

Sin embargo, no fue hasta que lo escribió un día en su computadora a un amigo que no conocía que el asunto no tuvo vuelta atrás. Ahora sus dilemas estaban en palabras, tenían un lugar en algún lado, alguien lo sabía, no importa quién. Ahora le había dado entidad. Ya no podía negarlo, no podía esconderlo. Ya no estaba sólo en su cabeza.

Así que, tan sólo un minuto después, la bola de pelos tenía que continuar su ruedo:

-Mamá, papá, ya sé que es lo quieren, pero voy a dejar ingeniería. Me voy a pasar a arquitectura.

Entonces, una mueca del padre, una leve angustia en sus cejas y mamá que demora un instante pero que se le vienen como unas lágrimas a los ojos:

-Ay Giuli, yo nunca te lo quise decir, pero sabía que esto en algún momento iba a pasar. Sabía que no te gustaba la carrera y que lo tuyo era arquitectura, pero no te quería influenciar.

Y Giuliana de repente se sintió liviana, como si pesase 10, 20 o hasta 30 kilos menos. Como si no pesase.

Su mamá podía no estar diciendo la verdad, su mamá podía estar mintiéndole acerca de que lo intuía para aflojarla, pero no importaba. Su mamá era, una vez más, la mejor mamá del mundo.

2 comentarios:

martina dijo...

qué lindo, es genial cuando te apoyan en lo que vos quieras hacer

¿dale un nombre a mi bicicleta? depende cómo sea...la mía se llama negra porque tiene todos los colores menos negro

un abrazo virtual!

Florci dijo...

El aguante incondicional. Todos sentimos ese miedo en algun momento y sabemos lo que se siente.